El Barça, tendrá que imponerse al Real Valladolid en el Camp Nou. Por su parte, el Madrid, con Higuaín, visitará al Málaga.
Todo puede pasar, nada está descartado. Para el Barcelona de Pep Guardiola, un triunfo será la merecida recompensa después de una temporada a un altísimo nivel futbolístico, pero que no se materializó en igual cantidad de títulos que la anterior, cuando el conjunto azulgrana conquistó el triplete: Liga, Copa del Rey y Champions League.
Los campeones vigentes llegaron a semifinales en la máxima competición europea, donde fueron eliminados por el Inter, y cayeron en octavos de final de la Copa del Rey ante el Sevilla, que es finalista.
"Podemos lograr el cuarto título” -después de las Supercopas de España y Europa y Mundial de Clubes-. En la Liga hemos tenido una regularidad brutal", aseguró hoy Guardiola, quien destacó además que lo mejor de la temporada ha sido "la manera en que sus jugadores dignificaron la camiseta”. Distinta fue la trayectoria del Real Madrid este año.
Los merengues habían depositado todas sus esperanzas y 300 millones de euros en el último proyecto "galáctico” liderado por Ronaldo, Kaká y Benzema, y recibieron un durísimo golpe al ser eliminados por sexto año consecutivo de la Champions –cuya final se jugará en el Bernabéu- por el Olimpyque de Lyon, y fueron humillados por el Alcorcón de segunda división en la Copa del Rey.
El conjunto blanco se aferró entonces a la Liga para salvar su orgullo, pero tanto el gran nivel como la regularidad del Barcelona, que se impuso en los dos encuentros disputados entre ambos, han puesto las cosas muy difíciles para los dirigidos por el chileno Manuel Pellegrini. Más allá de estos antecedentes, el conjunto azulgrana afronta mañana un partido "muy complicado porque el Valladolid se juega la vida”, recordó Guardiola, pese a la superioridad que muestran los números que separan a ambos equipos.
El técnico catalán advirtió que Javier Clemente, entrenador del Valladolid, "no es defensivo, sino muy directo”, aunque parece que preparó una numerosa defensa, ya que su equipo se está jugando la categoría. Para el encuentro, Guardiola no cuenta con el cerebro del equipo, Xavi Hernández (que acumuló tarjetas), y aunque no reveló como va a cubrir esta baja tampoco descartó que Andrés Iniesta, quien estuvo lesionado un mes, salga en el once titular.
Por su parte, el Real Madrid, con la posible baja de Guti, también encontrará una fuerte resistencia en La Rosaleda, donde los andaluces del Málaga, con 36 puntos, necesitan sumar para evitar el descenso, aunque pueden llegar a salvarse si pierden el Valladolid (36) y Tenerife (36), el Racing de Santander (36) puntúa y el Xerez (33) del argentino Néstor Gorosito no gana. De conseguir un triunfo, el Real Madrid igualmente puede quedarse en seco esta temporada, lo que pone en riesgo la continuidad de Pellegrini después de un año poco glorioso.
"Sé que es malo no ganar un título pero no creo que la evaluación final difiera mucho en función de si ganamos o no”, aseguró el chileno, en medio de rumores sobres sus posibles sustitutos, entre quienes figura el portugués José Mourinho, responsable de la eliminación del Barcelona de la Champions. La última palabra no está dicha. Falta un partido, 90 minutos de juego, de ilusión, pasión, sudor y lágrimas. Pero mañana se sabrá quién de los dos grandes titanes del fútbol español es el campeón.
Telam
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