Con Jorge Rial entrando a la casa, la gala de anoche de Gran Hermano 2011 fue más tranquila que las previas (aunque siguieron algunos retos por la seguidilla de "incidentes"), pero con cifra récord -hasta ahora- de nominados: fueron cuatro.
Del póker de nominados, dos terminaron así por voluntad propia. El inefable Juan Pablo repitió la decisión que había tomado la semana pasada y eligió no votar a ninguno de sus compañeros porque –algo así explicó- todavía no tenía en claro quién se merecía menos "cumplir su sueño". Dato al margen, ya van tres semanas de programa...
Otro que se autoimpuso el "ir a placa" fue Cristian U., el participante sobre el que pesa un pedido de detención por una supuesta agresión a un abogado. Alejado del núcleo duro de los chicos de la casa, y con una pose de rosquero importante, anduvo leyendo el reglamento con detenimiento y apostó por esa estrategia.
Los otros dos concursantes "a placa" fueron elegidos por el voto de sus compañeros. El más elegido fue Leandro, uno de los cabecillas de la rebelión de los últimos días por los destrozos en la casa. Para su ubicación final, fue clave el uso que Luz hizo de la carta que duplicaba sus votos.
Otra carta fue importante para definir la nominación de Pamela, por segunda semana consecutiva en la cuerda floja. Solange había sacado siete votos, pero con la facultad de pasarle la mitad a un competidor, lanzó el nombre de Pamela y la condenó a la decisión telefónica. El domingo se sabrá quién se va.
Al margen de la votación en vivo, el aspecto más destacado de la gala fue el ingreso de Jorge Rial a la casa para comunicarles a los participantes que el público había definido por goleada sancionarlos por los destrozos de los últimos días. Varios de los participantes lo habían criticado fuerte por el castigo. Milagros de la presencia en vivo de una celebridad, luego hubo arrugues evidentes.
Clarin
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