domingo, 17 de octubre de 2010

Perdonar es una decisión…

Muchas veces pensamos que el perdón es un regalo para el otro sin darnos cuenta que los únicos beneficiados somos nosotros mismos.
El perdón es una expresión de amor.
El perdón nos libera de ataduras que nos amargan el alma y enferman el cuerpo.
No significa que estés de acuerdo con lo que pasó, ni que lo apruebes. No significa dejar de darle importancia a lo que sucedió, ni darle la razón a alguien que te lastimó. Simplemente significa dejar de lado aquellos pensamientos negativos que nos causaron dolor o enojo.
El perdón se basa en la aceptación de lo que pasó.
 

Se habla de varios tipos de perdón, pero sin duda el más importante es el PERDONARSE a UNO MISMO por todas las cosas que no fueron de la manera que pensabas. Perdonarse a sí mismo por el daño causado a otros. 
En muchos aspectos de nuestra vida hemos sido el heridor y el herido: nos hemos despreciado, nos hemos saboteado, nos hemos exigido hasta agotarnos, nos hemos expuesto al abuso reiterado de otros heridores, sin brindarnos cuidado ni afecto... (Incluiría en ello el pedirle perdón a nuestro cuerpo, pues con frecuencia ha sido lastimado por nuestras actitudes hacia él). 
Pedirse perdón es un acto de amistad consigo mismo, tal como lo haríamos en el segundo perdón con cualquier ser querido. Y… necesitamos ser para con nosotros mismos un ser querido! El único con el que conviviremos hasta el fin de nuestros días (y más). Recordando también que, como dijo Jung: “Nadie puede relacionarse con otro mientras no se relacione primero consigo mismo”. 




No hay comentarios:

Publicar un comentario

Animate a comentar

Tus comentarios nos ayuda a seguir !!!

Related Posts with Thumbnails